Lo que pudo ser.

Llega a ti como un recuerdo lejano, como por arte de magia, como algo de lo que hacía años que no recordabas, como algo que hacía años que no querías recordar, llega un sentimiento de nostalgia, de recuerdos en donde tú vivías de sueños e ilusiones, en esos momento no te importaba, al fin y al cabo eras feliz, y eso era lo más importante.
     Es inevitable que un día pienses todo lo que pudo haber sido, es inevitable que sueñes con lo que pudo ser, con aquello que creyó que él conseguiría, aquello que tan solo él podría darle, y aunque no fuese así, es inevitable pensar en ello.
     Te detienes y olvidas todo cuanto te rodea, ya no ves a las personas que están a tu alrededor, ya no recuerdas lo que quieres ni lo que querías hacer, sencillamente vuelvas a un pasado donde eras feliz, esto no quiere decir que ahora no sea así, pero... en ese pasado, las cosas eran diferentes, allí existían las casualidades, las coincidencias, las ganas de creer en algo improbable, en ese pasado alimentabas tu día a día con simples sueños, con simples esperanzas que nunca llegaron, pero claro... siempre estaba la frase de "la esperanza es lo último que se pierde" No sabes muy bien cómo llegaste a ese día, al día en que la perdiste, en que ya ni si quiera la esperanza valía, supones que no podías esperar algo donde no había nada, esperar a alguien cuando no había nadie, y creer en algo... que no existía.

     Todo esto que en su día tu ayudó a pasar pagina, a... mirar las cosas de otra manera, a necesitar un tiempo para que las aguas volviesen a su calma, para volver a tener fuerzas y creer en lo improbable, todo esto en ese recuerdo no sirve de nada, porque ahí es cuando recuerdas tus propios recuerdos, recuerdas tus tantos y tantos sueños, recuerdas tus sonrisas del día a día, recuerdas tus nervios al creer verlo, al sentir que estaba cerca de ti.
     Realmente recuerdas cosas que ya no valen la pena recordar, pero... son recuerdos, son sentimientos que te ayudaron a miles de cosas, a madurar, a saber lo que es sentir, a saber lo que es ilusionarte por un mínimo detalle, a reír y llorar con una canción, a hacer miles de cuentos con final feliz...
     Los recuerdos tan solo son eso, Recuerdos... tienen algo bonito, que se recuerdan los importantes, los que más te cambiaron, pero tienen un defecto, y es que por mucho que intentes huir de ellos, siempre están en tu mente, y un día sin darte cuenta, te detienes y los recuerdas, los recuerdas sin darte cuenta que han vuelto a renacer, por arte de magia...