futuro

     Aumenta con cada segundo que pasa, dicen que es cosa de que el tiempo transtorna o que el tiempo... intenta colocar las cosas en su sitio, pero... lo cierto es que no importa que todo esté removido, que nada encaje a la primera o que sencillamente todo sea distinto con todo. Se trata de seguir averiguando por qué te sientes tan bien alrededor de ese desastre, alrededor de todas esas cosas que te están haciendo cambiar. 
     Y llegas a sentir que el tiempo se detiene si tú así lo quieres, que las personas de tu mundo desaparecen si es necesario, que todo lo que tenía que encajar... no es prescindible, que 300 sensaciones se pueden esconder en una mirada, que el roce de su mano consigue que te sientas segura, que apuestes que nada malo va a pasar...
     Por momentos... por grandes momentos olvidas esas cosas que aunque no las quieras ver están ahí, haremos durante un tiempo como que no existen, que mientras la cosa vaya así... todo cuanto queramos será posible, y por un momento quiero que olvides a dónde iremos, y que recuerdes... dónde estamos.

SH.

     Sí... somos seres humanos, nos equivocamos constantemente, perdemos oportunidades por miedo a fracasar, lloramos sabiendo que de nada servirá, nos creemos muchas cosas que nos cuentan, pretendemos mostrarnos fuertes al mundo cuando lo cierto es que somos de cristal, frágiles y delicados, deseamos encontrar al amor de nuestra vida y cuando llega en vez de vivir y disfrutar... buscamos problemas insignificante, sí... somos humanos porque nos dejamos llevar por las pasiones, porque dudamos incluso de que hoy es martes, porque el luchar por algo para nosotros se basa en tan solo quererlo, porque no somos capaces de gritarle al mundo lo que queremos aunque ni si quiera lo sepamos, aunque cambiemos de opinión... aunque nos peguemos horas gritando boberías. Tenemos cientos de defectos por el simple hecho de que somos seres humanos, pero lo cierto es que también somos seres humanos cuando queremos algo o a alguien y lo aferramos con todas nuestras fuerzas... sabiendo que nunca lo dejaremos escapar, aunque alguien venga y nos cuente... que somos seres humanos.

éramos...

     Éramos un corazón, un bonito y tierno corazón al que nada del exterior le podía afectar, cerrábamos los ojos y nos dejábamos llevar aunque una guerra nuclear nos invadiese, no nos importaba... porque estábamos juntos en nuestro corazón. 
     Por muy extraño que pareciera... ninguno tenía miedo al dolor, habíamos olvidado por momentos lo que aquella palabra significaba al estar juntos, hasta que un día... una franja se abrió por uno de los laterales. Quisiste taparme los ojos para que no la viera, quisiste cantarme 100 canciones para que no escuchase el sonido del crujir, pero lo cierto es que la verdades siempre salen poco a poco.
     Supe lo que era el no querer hacer algo pero tener que hacerlo, así que me di la vuelta y observé aquella franja, la veía más grande por momentos, y lo más extraño es que no entendía el por qué. Supe que debía irme, y así lo hice a pesar de que no quisiera, a pesar de que todas mis fuerzas, todo mi corazón... quisiesen quedarse contigo, con nosotros en nuestro mundo, pero desde que se abre un franja... empiezan a abrirse muchas más, y sabía que no podría soportarlo.
     Ahora no voy a mentirte, no he olvidado nuestro corazón, al contrario... lo observo día a día pero de lejos... por que sé que no es el momento de volver, ambos debemos esperar a que por alguna razón esa franja se vaya cerrando poco a poco, hasta el momento en que volvamos a apostarlo todo por lo nuestro, hasta el momento en que juntos... cerremos cada franja que pueda salir. Ahora es el momento de ser fuertes.