martes, 8 de febrero de 2011

Un Giro.

     Veo te rostro, y comprendo que eso es lo único que me calma, saber que estás en el mismo mundo que yo... eso me tranquiliza, he llegado a romper cosas imaginando que en un futuro... no estarás a mi lado, he sido capaz de gritar en pleno verano que quiero que llueve... solo por volver a ver la lluvia con la que te tuve tan cerca. Veo tu mirada y mis ojos lloran, ¿por qué no? ¿por qué una persona no puede estar con aquella que quiere? No, mejor dicho ¿por qué una persona no puede querer a aquello que tanto le quiere? 
     La vida es rara, es un estúpida rueda de bicicleta, giramos y giramos sin darnos cuenta que el tiempo pasa, sin darnos cuenta que necesitamos ese empujoncito para comenzar a girar, que... después podremos estar ¿unos días? ¿unos meses? Quizás un par de horas... olvidamos lo más importante, no sabemos rodar solos, es duro afrontarlo, acabas admitiendo algo malo... dependes de alguien, pero no es tan malo a como crees, verás... todo empieza bien, alguien se ofrece a ayudarte, y ocurre lo malo, confías en él, confías tanto que llegas a creer que los dos estáis en la misma rueda, en el mismo giro del día a día, pero un día algo ocurre, miras a tu alrededor y... estás sola, sigues girando pero te asusta saber que dejarás de hacerlo de un momento a otro, no entiendes el por qué, el por qué se quiso alejar de ti, no puede evitar por mucho que te aconsejen tus amigos y amigas el pensar qué hiciste mal, qué le ocurrió, y nunca... nunca podrás evitar el tener la esperanza de su regreso, el que... un día todo vuelva a tu normalidad, en que él esté a tu lado... y tú sonrías girando.
     Veo tu rostro, y lo único que puedo pensar a pesar del tiempo, es... "Has Vuelto"

No hay comentarios:

Publicar un comentario