viernes, 22 de julio de 2011

Segunda Oportunidad.

     Te equivocaste, lo hiciste, es más... una y otra vez, pensaste que fue la última vez, pensaste que las disculpas lo arreglarían todo, utilizaste lágrimas, flores y palabras, muchas palabras, pero... lo cierto es que te equivocaste.
     Lo intentas arreglar, dices que nunca es tarde o... algo así, pero hay errores irremediables, porque desde un principio creo que yo ya... lo esperaba, sí... lo estaba esperando, confiaba en ti pero sabía que acabarías cometiendo el error, no sé... supongo que prefería pensarlo desde el principio para ahora que ha sucedido no me doliese tanto pero... idiota, eso he sido porque de nada vale, y es curioso eso de que aunque te esperes el daño, el dolor, el error o lo que sea... aunque pienses que llegará, cuando llega, duele igual a cuando ni si quiera pensabas en ello, es extraño... pero es así.
     ¿Segundas Oportunidades? No sé... todo el mundo la merece, no lo niego pero... terror, ¿sabes lo que es eso? Pues lo que siento yo a que me pueda volver a pasar lo mismo, a que me confíe y llore, porque tú lo cometes y te arrepientes, haces cosas para sentirte mejor y todo eso pero... ¿qué hago yo? No me queda nada, recuerdo momentos y más me duele tu error, y más y más... 
     Te equivocaste y... con el tiempo he llegado a una extraña conclusión, ¿y qué? No me importa tanto a como creía, porque te llevo buscando mucho tiempo, y te quiero, y solo por esa razón... vale la pena darnos una Segunda Oportunidad.

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